tipografía Bauhaus

En busca del «alfabeto ideal»

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La simplicidad de la forma se extendió hasta las letras del alfabeto en la Bauhaus y sus estudiosos prosiguieron una vez cerrada la Escuela.

Este estudio sobre el alfabeto ideal lo hizo Herbert Bayer, pero fue impulsado por  Moholy-Nagy y Peter Brehens en los albores del S.XX en la Bauhaus. Los inicios fueron el empleo de los tipos de letra sans-serif y un sistema con base en una cuadrícula para articular el espacio.

Y en lo del uso de la cuadrícula vuelvo a encontrar otra relación conmigo misma, dado que no hay libreta o papel en blanco que compre y que no contenga estos cuadros para controlar mi letra deforme. En eso de la sencillez y la simplicidad de la formo no logro parecerme al prototipo, pero no será por mi perseverancia y mis famosas libretas de cuadros, cual adolescente.

 La búsqueda de una nueva tipografía y la ruptura con el tipo gótico o los vestigios de la Edad Media era una necesidad a principios del siglo pasado.

Y decía Moholy-Nagy: «A priori, los caracteres nunca deben forzarse dentro de un marco preconcebido, por ejemplo un cuadrado. (…) Nosotros utilizamos todos los tipos de letra, tamaños de tipos, formas geométricas, colores, etcétera. Queremos crear un nuevo lenguaje tipográfico, cuya elasticidad, variedad y frescura compositiva sea dictada exclusivamente por las leyes internas de la expresión y los efectos ópticos».

Pero el resultado parece que no fue exactamente ese, ya que la tipografía Bauhaus resultó tener un estilo muy concreto, aunque consiguiera eso sí, crar una nueva tipografía, más legible y sencilla. Se centraron en el palo seco, un tipo apropiado para la industria y el mundo moderno, ya desde la década de 1.920.

Más tarde, la propuesta concreta, en este caso de Bayer con el estudio anteriormente citado y que bebía de la Escuela, fue crear un nuevo alfabeto fundamentado en la geometría y en el que se abandonara todo aquello que recordara al carácter manuscrito.

Dicho alfabeto ideal debería carecer de mayúsculas, mostrar uniformidad de grosor de todas las partes de la letra y renunciar a todo lo que sugiriera trazos ascendentes y descendentes, así como una simplificación de la forma a favor de la legibilidad. Se consideraba que cuanto más simple fuera la apariencia óptica, más fácil sería la comprensión de la letra.

En os alfabetos de Bayer y Joost Schmidt, las letras se reducían a formas simples y geométricas, omitiéndose el uso de las mayúsculas,estimándose innecesarias dado que no existe diferencia entre los sonidos de la caja alta y la baja.

Pero aunque la Nueva Tipografía fue un «movimiento» atribuido a los anteriores autores, hay que descatar un monográfico titulado «Tipografía Universal», de Jan Tschichold, (1902-1974), publicado en la revista Typographische Mitteilungen. Con una tirada de 28.000 ejemplares, dio a conocer por primera vez su corpus teórico, despertó ardientes discusiones y convirtió a su autor en uno de sus máximos exponentes.

Diferenetes conceptos: de la pintura al diseño gráfico o la escenografía

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La pintura dentro de la Bauhaus supone su pilar fundamental hasta la entrada de la Arquitectura como taller. Son muchos los artistas y sus estilos, por lo que he decidido exponer y ver algunas de sus obras para que podáis elegir al que más os guste. Así, podemos decir que Itten, Muche, Klee y Kandisnsky presentan en común la espiritualidad y la poética de la geometría. Por otra parte, Moholy-Nagy, Albers y Bayer, por ejemplo, son representanates de una nueva orientación dominada por la técnica y la racionalidad.

Sobre Kandinsky ya dejamos un post anterior excluvamente dedicado a él, aunque merezca mucho más. De hecho, fue el pintor que permaneció en la Bauhaus hasta su disolución en 1.933. Él tiene sus propias teorías sobre el color y las formas y aunque lo encasillamos en el Constructivismo, los  hay más puristas en este ámbito. Nos referimos con ello a Lázló Moholy-Nagy, (1.095-1.946), el último de los grandes maestros que se incorporó a la Bauhaus. Fue autodidacta, y por eso su estilo está libre de academicismos, lo que se deja ver en su obra y que a mi particularmente me encanta y me llama especialmente la atención.

En este enlace podemos echar un vistazo a gran parte de su obr y observar su evolución desde el Cubismo  hacia la corriente del Dadá y del Constructivismo, que tuvo lugar en Berlín ya después ya de la guerra, centro de las corrientes artísticas más avanzadas. Muy rápidamente, creó un personal Costructivismo geométrico que imprimiría un cambio radical en la orientación de la Bauhaus.

Su incorporación a la Bauhaus en 1.923 supuso un impulso al funcionalismo y la producción tal y como Gropius pretendía y significó la introducción del verdadero Constructivismo, mucho más riguroso que el que se había creido ver en las obras geométricas de Wassily Kandinsky.

La moderna actitud de Moholy-Nagy ante en arte y la técnica resultó algo sorprendente durante los años de Weimar, pero cuando la escuela estaba en Dessau y las ideas de productividad se habían impuesto, su pensamiento estuvo plenamente integrado. Estaba muy interesado en la investigación de nuevos medios artísticos y, de este modo, se adaptaba plenamente a la orientación que Gropius quería dar a la Escuela.

Realizó experimentos fotográficos que acabaron por incorporarse a su obra pictórica, (transparencias, superposiciones, luz, etc.). También realizó esculturas o composiciones tridimensionales en madera, cristal y metales refractantes.

Pero además de su labor artística cabe destacar su labor como tipógrafo, siendo aquí donde quería yo llegar. Además de la búsqueda de la claridad y la legibilidad por encima de todo, ideó tipos de imprenta de gran sencillez. Fue el responsable de la imagen unitaria de los catorce libros de la Bauhaus, editados junto con Gropius.

© László Moholy-Nagy, Prospectus cubierta para el 14 Bauhausbücher (14 Bauhaus libros), 1928. Stiftung Bauhaus Dessau. © Hattula Moholy-Nagy/DACS 2012
© László Moholy-Nagy, Prospectus cubierta para el 14 Bauhausbücher (14 Bauhaus libros), 1928. Stiftung Bauhaus Dessau. © Hattula Moholy-Nagy/DACS 2012

Y todo esto fue tenido en cuenta por Herbert Bayer, quien creó caracteres de fácil comprensión y que alcanzaron gran difusión. Tras ser alumno de la escuela y elegido por Moholy-Nagy para diseñar la portada del catágo de la Escuela, se convirtió en profesor del Taller de Impresión y Publicidad, dependiente del departamento de Diseño Gráfico.

Pero como esto del diseño gráfico ya merece un capítulo aparte y varios posts, vamos a seguir exponiendo algunas pinturas para conocer las diferencias entre los autores y que podáis elegir a vuestro favorito, auque yo ya lo haya hecho.

Lyonel Feininger, (1.871-1.956), fue considerado el primer pintor cubista alemán y además autor del grabado en madera, (xilografía), de la portada del Programa de la Bauhaus, (1.919), que representa una catedral.

Paul Klee, (1.879-1.940), fue maestro de la forma en el Taller del Tejido hasta su abandono en 1.930. Concebía el arte como la posibilidad de craer una nueva naturaleza en la que las formas abstractas, que no pretendía copiar ni imitar, eran los elementos básicos. Su interés por el movimiento se hizo patente con el pasod e los años.

Oskar Schlemmer será nuestra última parada, (1.888-1.943). Llegó  a la Bauhaus junto con Klee en 1.921 y se quedaría hasta el ’29. Primero como Maestro de la Forma en el Taller de Escultura y posteriormente en el de Escenografía. Este artista centra su carrera en el hombre. Lo representa como figuras de formas reducidas y simples, adptándolas al plano bidimensional, quizás entre la forma geométrica y la figura humana, por lo que se puede hablar de Constructivismo antropocéntrico. Es decir, tiene en común con los constructivistas el interés por el lenguaje de las formas geométricas y sus simbolismos, pero se diferencia de ellos al introducir la figura humana.

A partir de 1.923 la superficialidad de sus obras de juventud se trocó por una búsqueda del relieve, de la tridimensionalidad. Durante toda su vida buscó la mera de armonizar la imagen del hombre con el arte y lo haría tanto en la pintura, como en sus producciones escenográficas, (decorados, máscaras, trajes, etc.).